El hormigón es un material presente en la mayoría de las construcciones actuales. Su descubrimiento representó un gran avance para toda la sociedad y hoy en día es uno de los materiales más estables y duraderos. Y es la acción del tiempo y sus efectos los que originan el artículo de hoy.
Conforme se usa, decora y se expone a la pared o suelo en diferentes ambientes, es posible que el hormigón pueda deteriorarse y se necesite de una capa de pintura para darle una segunda vida. La pintura puede hacer que tu pared o suelo se convierta en una nueva área renovada y llena de vida y nuevas vibras dentro de tu oficina, hogar o cualquier otro lugar.
Problemas Comunes al Pitar el Hormigón
El hormigón es un compuesto derivado del cemento, arena y grava que es excelente para hacer superficies duraderas como suelos y paredes, maceteros, mesas… Pero su superficie tiende a ser un poco arisca al momento de adherirse a la pintura y se suelen presentar algunos problemas como:
- Manchas: de sucio, grasa, aceites o cualquier otro en material que haya estado en contacto con el hormigón. Todas las manchas evitan que la pintura se adhiera bien al hormigón.
- Adherencia: El material es muy rústico por lo que es difícil que la pintura pueda adherirse por completo y que la brocha llegue hasta todos los lugares.
- Porosidad: Mientras más poros existan en el suelo, más burbujas se formarán y ellas pueden hacer que la jornada de pintura se complique.
- Regularidad: Debes asegurarte que el suelo esté bien nivelado para que el trabajo quede prolijo. De lo contrario. Verás como la pintura puede correrse más hacia un lado y acumularse ahí e incluso como se adhiere más en un lado que en otro.
Pintar el hormigón es una tarea sencilla y aquí te la detallamos paso a paso.
Cómo Pintar Hormigón
Como se mencionó anteriormente, pintar hormigón es una tarea sencilla siempre y cuando le dediques el tiempo y la fuerza necesaria. Es un material bastante resistente y lleno de relieves que deben ser observador con anticipación antes de simplemente pasar la brocha con pintura sobre el área.
- El secreto está en los detalles
Antes de comenzar a pintar el hormigón, primero debes observar la superficie y ver su estado. Puede que la pared o suelo tengan algunas imperfecciones o que incluso estén llenas de polvo. Debes identificar todos estos detalles para poder saber cuál será tu siguiente paso y hacerlo de forma correcta. Aquí debes tener muy en cuenta cual es el color que quieres aplicar y también que base requiere para que pueda agarrar bien la tonalidad.
- Limpia el Espacio
Si ya visualizaste todo lo que está sucio y las manchas más grandes, entonces es momento de comenzar a limpiar. Aquí es bastante importante que puedas enfocarte en eliminar cada una de las manchas para que siempre sea posible obtener la mejor superficie. Utiliza desengrasantes, cepillos, detergentes y demás que puedas ayudarte a eliminar todo el polvo y cualquier otro resto de suciedad.
Normalmente, las superficies hechas con hormigón son bastante amplias por lo que la superficie a limpiar suele ser grande. Tómate tu tiempo y céntrate en conseguir un buen resultado ya que necesitas de una pared, puerta o suelo de hormigón limpio para que el acabado de la pintura pueda quedar justo como te lo imaginas.
- Reparaciones pertinentes
En este punto requieres de la información que se recolectó durante el primer paso. El suelo debe estar completamente nivelado para que puedas pintarlo y no debe tener desperfectos. Si existe algún hueco, entonces rellénalo; si hay alguna zona abombada, entonces hay que nivelarla… Pueda que algunos desperfectos deban ser reparados por un profesional, pero depende de este paso que tan bien quedará el resultado final.
Puede que debas aplicar un lijado rotativo para el suelo de hormigón y así eliminar las impurezas ya que es capaz de abrir los poros de la superficie. Hay veces que es posible que se necesite un granallado como sistema de limpieza para dejar todo listo para la pintura o un ataque químico con ácido clorhídrico para poder eliminar las partes sobrante del hormigón. Hay muchos métodos que pueden llegar a aplicarse y todos te ayudarán a pintar mejor el hormigón.
- Protege la Superficie
En esta ocasión lo único que debes hacer es proteger todo lo que está alrededor del hormigón que vas a pintar. En caso de ser una pared entonces retira cada uno de los adornos, protege la toma de corriente y también cubre el rodapié o el piso con cinta de carrocero. Todo depende de que haya. Lo importante es que lo cubras todo para evitar que se manche de pintura.
En el caso del piso debes evitar que la pintura se pase a las paredes o a los pilares que estén cerca.
- Sellador
Debes aplicar un sellador que ayude a que la superficie se prepare adecuadamente. Este sellador puede aplicarse con el rodillo y así logras abarcar más espacio en menos tiempo. La razón se aplicar un sellador antes de la pintura es para evitar que la pared absorba la pintura después. Así podrás ahorrar pintura y evitarás que la humedad arruine tu creación.
Dependiendo del tipo de barniz que elijas, el color de la pintura puede variar. Por eso, elige uno que esté acorde con el color que hayas elegido para pintar después. Deja que el sellador se seque por al menos 4 horas y luego podrás pintar.
- Aplicando la Pintura
Ahora que ya haz cumplido con todos los pasos anteriores es momento de pintar la superficie de hormigón. Puedes utilizar pinturas al agua como acrílicas o de látex o incluso pinturas bituminosas que te darán una película impermeabilizante que protegerá mejor la estructura. Otra opción son las pinturas transparentes o pinturas al aceite.
La pintura debes aplicarla con un rodillo prestándole especial atención a las esquinas para no pintar la pared. Inicia por la esquina más alejada de la puerta y luego ve dirigiéndote de regreso a la entrada.